miércoles, 9 de marzo de 2011

Divagaciones

De a ratos se cuelan por las hendijas los sentimientos que afuera dejé. Hoy me dió con escribir y se hace cada vez más borrosa la cláusula aquella que firmé para que la culpa se vaya o más bien para que no venga. Esto no es un dejavú, esto ya lo viví, ya lo oí en las canciones y por ahí andan las marcas también. Y yo no sé de dónde me sale todo esto si yo ya me volví de marfil y cuelgo de una pared oxidada y polvorienta y no quieras soplar, no vas a lograrlo porque para eso debes acercarte y la prisión de tus propios miedos no te va a dejar. Quisiera hacer que te detengas, devolverte a tu rincón, hacerte venir a mí, que entiendas las reglas del juego... pero qué es lo que quiero? Estar a salvo. Pero es tarde de aquí sale algo roto y espero ser sólo yo aunque dudo de si me cabe alguna rotura más. Porque lo que busco no está fuera sino dentro, ahí el pegamento, los márgenes, las líneas, el perfume.
Y a ti, a ti pensaba dedicarte unas líneas pero esto se trata de mí así que no jodas.

No hay comentarios: