viernes, 19 de septiembre de 2008

Divagaciones...


Hoy no son suficientes las lágrimas para llorar,
Ni los hombros para derramarlas,
Hoy no son suficientes las voces para gritar esto que siento
Ni son suficientes los corazones para aguantarlo ni las mentes para entenderlo.

Hoy no son suficientes las lágrimas, ni los hombros, ni las voces,
ni los corazones, ni las mentes de todos cuentos habitan esta tierra
a la que me atan el dolor y la muerte.

Talvés mañana sí, pero hoy, no son suficientes.

viernes, 12 de septiembre de 2008

Breve I

"Ella, aprendió a mirar a través de sus ojos, a sentir a través de su piel y a pensar a través de sus sesos; una vez se miró al espejo y no halló su reflejo sino su sombra, entonces una parte suya comprendió que algo andaba masl, pero ya era demasiado tarde."

miércoles, 10 de septiembre de 2008

Una rosa para la Niña Mala

A propósito de la novela Travesuras de la Niña Mala de Vargas Llosa:

"Es un libro genial, llegué a identificarme con la Niña Mala; durante los dos años que duró mi relación con Xxx, lo hice dufrir muxo, mis desplantes y la forma en la que lo ignoraba eran realmente crueles, por lo menos yo, a diferencia de la niña mala, no me iba con otros y no lo amé, ni al principio ni al final, pero lo quise, eso sí, aunque pueda sonar irónico, lo quise y mucho. Un buen día, después de dos años, nuestra relación terminó, él no objetó y yo menos; a la verdad que no supe muy bien porqué, talvés me di cuenta de que esa relación era un error o me cansé de fingir (en principio lo hacía muy bien, nadie hubiese dicho que no sentía amor por él, de a ratos fui una novia abnegada, ideal pero con el tiempo el hastío me fue ganando y me harté, así que ya no lograba disimular mi desencanto de la relación, esto se fue haciendo cada vez más obvio, hasta que no pude ocultarlo más, me cansé y me rendí) o él se hartó de aguantarme, o todo junto, no lo sé.

Si tuviera la oportunidad de ver a la niña mala, de tenerla frente a frente, la abofetearía, acto seguido le tomaría la mano y le diría que la comprendo, que sé de su dolor, que podía morir en paz porque ya había pagado con intereses el dolor que causó a Ricardo y que yo (aunque talvés no le importara) estaría con ella. Y, el día de su muerte, dejaría caer en su tumba una rosa, para que dondequiera que estuviera supiera que yo había estado allí, llorando junto a Ricardo su partida."

martes, 2 de septiembre de 2008

Divagaciones...

La verdad es que no sé muy bien que decirles, en primer lugar quiero dar las gracias a quienes estuvieron ahí durante mi ausencia. En segundo lugar, quiero comentarles que aquellas culpas que me atormentaban se van esfumando poco a poco mientras desenredo el pasado; ahora que me he puesto en lugar de otros, sé que no soy quien para juzgar y que nadie es quien para juzgarme. He redescubierto lo bueno que hay en mí y que por un momento creí ver desaparecer. Paso a paso los pesares se han ido reduciendo, ahora me es un poco más fácil perdonar. He dado un buen paso en este proceso personal que sigo pero no es suficiente y no creo poder sola, tarde o temprano tendré que buscar ayuda profesional. Estoy poniendo todo de mi parte para que mis relaciones interpersonales marchen mejor aunque he estado bastante impulsiva e intolerante últimamente. Espero seguir creciendo y descubriendo (como hice durante estos días) el propósito de Dios en mi vida con cada cosa que en ella acontece y contar con ustedes para compartir mis experiencias para que crezcamos juntos.

P.D.: Lamento que algunas cosas no estén lo suficientemente explícitas para ser entendidas pero no puedo porque no quiero, decir nada más.