Siempre me sentí segura estando contigo, entre tus brazos tenía la certeza de que nada malo podría pasarme porque algo mayor me protegía, algo fuera de tí, fuera de mí. Ese algo era el Amor. En cuanto miraba tus ojos ahí estaba mi calma, el poco de paz que me daba calor en este cielo frío.
Eso es lo que me das, seguridad y amor. Es increíble, después de tanto... has de ser un santo o estar un poco mal de la cabeza.
El mundo gira rápido, la vida pasa, y lo insólito se hace posible gracias al tiempo, tu alma lo sabe y por eso no se cansa de esperar un milagro.
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